OTROS MIEMBROS DE LA FAMILIA RODRÍGUEZ (I)

E

n este apartado se desea desarrollar la evolución de diferentes líneas dinásticas familiares, que si bien no son el centro de la investigación que se desarrolla, tienen un peso de importancia en el poblamiento de San Ramón, en su carácter de fundadores.

Este aporte se considera vital en el aporte de datos a futuras investigaciones.  En otro orden, el sostenimiento de relaciones endogámicas, cierra el círculo de matrimonios entre parientes que se ha visto con alta frecuencia en los períodos históricos anteriores.  Ello permite evidenciar el recurso se empleaba no solo par desarrollar el poblamiento, sio que también para sostener las tradiciones familiares y las fortunas de cada grupo asumían un carácter prioritario. Esta costumbre se abandonaría ante el crecimiento evidente de las cifras poblacionales y la entrada de nuevos miembros.  Pese a la desaparición de esta costumbre, puede notarse en todo caso que en cuanto al origen, se tiende a descubrir la existencia de troncos comunes.

Las líneas señaladas con asterisco serán referidas directa o indirectamente en otras secciones del documento al efectuarse nuevamente uniones entre parientes cercanos.

Esta secuencia se hará en función de la familia Rodríguez Solórzano que como se ha dicho provenía de la ciudad de Alajuela, principalmente.  La aglomeración de datos evidencia que Ramón Rodríguez, trajo consigo a sus hermanas, entre las cuales como ya se ha expresado estaba Joaquina Rodríguez y sus hijos de apellido Gamboa. Hermanos suyos fueron:

Ramona del Carmen Rodríguez Solórzano (n. y B.1808), casada con Vicente Paniagua Astúa y fueron padres de los siguientes hijos:

María de la Trinidad Paniagua Rodríguez (n.1830), casada con José Idelfonso Cruz Villalobos,

Dámaso de Jesús Paniagua Rodríguez, casado con María Fabiana Quesada Ugalde,

Antonio de Jesús Paniagua Rodríguez (n.1844), casado con Mercedes Ugalde Argüedas, padres de:

Juan Rafael Paniagua Ugalde, casado con Gregoria Mercedes Rojas Castro,

María Dolores Paniagua Ugalde, casada con Salvador Barrantes Argüedas,

Abraham Paniagua Ugalde, casado con María de Jesús Barrantes Argüedas,

Francisca Paniagua Ugalde, casada con Rosendo Quirós Quesada,

Cristina Paniagua Ugalde, casada con Nicanor Espinoza Quirós,

Macedonio Paniagua Ugalde, casado con Belarmina Ugalde Trejos y

Luis Paniagua Ugalde, casado con Laudelina (Landelina) Guzmán Rodríguez*.

Nicolás Paniagua Rodríguez (n.1830), casado con Josefa Pérez Trejos*, padres a su vez de:

Adela Paniagua Pérez, casada con Pedro Madrigal Zamora,

Eligia Paniagua Pérez, casada con Dionisio Villegas,

Isaías Paniagua Pérez, casado con Rosalina Vargas y

Luisa Paniagua Pérez, casada con Vicente Fernández Roco.

Cayetana de la Trinidad Rodríguez Solórzano (B.1810), casada en Alajuela en 1830 con Juan Estanislao Lobo Loría. Fueron padres de:

Tranquilina Lobo Rodríguez, casada con Juan Francisco Murillo Rojas,

María Sinforiana Lobo Rodríguez, casada con Eugenio Villalobos Arias,

María del Rosario Lobo Rodríguez,

Serapio de Jesús Lobo Rodríguez, casado con Juliana Quesada,

Marcelino de Jesús Lobo Rodríguez, casado con Juana Carvajal Murillo y

Joaquín del Tremedal Lobo Rodríguez.

Rosalía de Jesús Rodríguez Solórzano (n. y B.1814), casada en Alajuela en 1834 con José Manuel Mora Aguilar, padres de los siguientes hijos:

María Josefa Mora Rodríguez,

Alfonso Mora Rodríguez, casado con Mercedes Caballero Zamora,

Manuel Mora Rodríguez, casado con Teresa Villalobos Méndez,

Juan José Mora Rodríguez, casado con Mercedes Acosta Chaves y

Rafael María Mora Rodríguez, casado con Ramona Vargas Solórzano.

María Teresa Rodríguez Solórzano (B.1815), casada con José de las Mercedes Cortés,

María Dámasa Rodríguez Solórzano (B.1821),

María Josefa Rodríguez Solórzano (B. y + 1834),

y Ramón Norberto Rodríguez Solórzano (B.1818, +1893), conocido como “el fundador de San Ramón”. 

   

 

Arturo Moncada (2002) lo refiere como

“uno de los primeros que llegaron ansiosos de trabajo a colonizar los terrenos de Palmares y también uno de los primeros en dejar aquellos campos para buscar nuevas regiones y respirar aires de más libertad, llegando por fin a instalarse definitivamente en San Ramón.  Llegó muy cerca el lugar en que actualmente se encuentra edificada la ciudad, pero no precisamente en el mismo sitio; éste fue escogido debido a la fertilidad y situación del territorio, por los señores don Florentino Alfaro (hermano del Presidente), don Pedro Saborío y don Manuel Soto” (p. 22).

Estos primeros años  del que sería el cantón ramonense  y la participación de Rodríguez son descritos del modo siguiente por Ángela Quesada Alvarado (1996):

“Y con los agricultores llenos de esperanza y de fe vienen sus familias.  Levantan ranchos, cuidan animales domésticos y cultivan granos para su alimentación.  Entre los primeros colonos que descubrieron estos lugares está don Ramón Rodríguez Solórzano, quien nos legó un vivo ejemplo de trabajo y honradez, amor a la tierra, consideración y entendimiento entre los colonizadores que con perseverancia darían los primeros pasos para el engrandecimiento del cantón (p. 5).

Posteriormente añade:

“Don Ramón Rodríguez Solórzano  (1818-1893) fue una de las personas más importantes en la formación y desenvolvimiento de este pueblo; honorable, fecundo y laborioso, como muchos de los compañeros que en aquel entonces se instalaron definitivamente en San Ramón de los Palmares para establecer su hogar [Rodríguez, Eugenio].” (p.7).

Él fue encargado de dirigir el levantamiento del cuadrante de lo que sería años más tarde la ciudad,  encomendado por el Presidente de la República, José María Alfaro.  Asimismo, fue encargado por los vecinos de la localidad fue solicitado para pedir a la Curia el permiso para edificar la primera ermita de la región.  (Ángela Quesada, 1996, p. 10 y Arturo Moncada, 2002, p. 22) Posteriormente aparece nombrado como Alcalde de San Ramón.  El señor Rodríguez residía 100 metros al Este del parque actual de hoy cabecera del Cantón.

“La casa de este fundador tenía un portón grande por donde entraban en las mañanas las vacas y las bestias. Dando vuelta hacia el Oeste, en su frente, había un robusto árbol de higo, para contentamiento de los chicos que iban a la escuela…” (Echeverría, ídem).

A Ramón se le recuerda con cariño y con respeto:

“Don Ramón Rodríguez y don Pío Villalobos Quesada son los más influyentes fundadores de la aldea y, con la gran autoridad que les da su prestigio como valientes organizadores y emprendedores en el barrio, se les encomienda la expedición” [en referencia al envío de tropas a la Campaña Nacional de 1856-1857] (Ángela Quesada, ídem, p.55).

Casado en Esparza el 6 de julio de 1857 con Juliana Rodríguez Bonilla, 

 

hija de Vicente Rodríguez Castro y de Isidora Bonilla Porras.  Fueron padres de:

José María Rodríguez Rodríguez, casado con Dolores Carvajal,

Joaquín Rodríguez Rodríguez, casado con

Juana López Castro, 

Relata Ángela Quesada que “puso en manos de su suegro, Norberto López una buena cantidad por la compra de su casa, y dicen algunos que el señor López enterró su tesoro y nunca se supo dónde” (p.16)

Joaquín y Juana fueron los padres de:

Bertalía Rodríguez López:

“Hija dilecta del pueblo de San Ramón, nace a fines del siglo XIX en el año 1899, el 8 de setiembre (…). Leía a los cinco años. (…)  Como profesora impartió lecciones de la escuela de niñas en Limón, también en el Colegio de Señoritas.  Fue directora de la Escuela de Niñas Delia Urbina Guevara de Puntarenas y la Escuela del Barrio El Carmen y finalmente en la Escuela Jorge Washington.

En el campo cultural su labor es valiosísima.  En la década de los cuarenta fue fundadora de un grupo cultural en San Ramón, el cual organizó conferencias con los mejores pensadores de la época.  Hasta San Ramón vinieron personajes de la talla de Rodrigo Facio, Roberto Brenes Mesén y Joaquín García Monge.  De este grupo surgió la Revista Surco que tuvo trascendentales repercusiones para Costa Rica. En 1943 dirigió junto con Raúl Zamora Brenes, el periódico ‘El Centenario”.  Con más de 80 años continuó trabajando incansablemente por la cultura ramonense.  Fue cofundadora del Grupo Rescate Histórico Cultural Ramonense”. (Ángela Quesada, 1996, pp. 177-178).

Casada con Wallace Grayson “estadounidense de origen inglés muy latinizado, con quien compartió 30 años de vida” (Quesada, ídem, p. 177).

Corina Rodríguez López (+1982):

 

“Cuando  era muy  notoria  y no  muy  bien vista la actuación de la mujer en la política de nuestro país, nace, crece, se educa en el extranjero y se enrola en las contiendas opositoras o con el Gobierno, una de las primeras damas revolucionarias en Costa Rica (…).

Si bien Corina es una de las más grandes oradoras, con el don de conducir las masas en dirección de sus filas, también es la más humana y caritativa.  Maternalmente recoge en su pequeña casa a muchas señoritas con dificultades económicas, las alimenta, las saca avante con sus estudios y logra becas en el extranjero para su superación (…). Corina fue una de las primeras mujeres que sufrieron la cárcel.  Estuvo presa cuando triunfó la guerra del 48 y de ahí salió al exilio a la República de Panamá donde trabajó como profesora de Enseñanza Superior.  Cuando los niveles de política bajaron en su patria, vuelve a Costa Rica y sigue trabajando con jardines infantiles, como maestra pensionada.  Sobre Corina se ha escrito mucho en periódicos del país” (Ángela Quesada, ídem, pp.169-171).

Casada en segundas nupcias con George Cornick (Había enviudado de un hombre de nombre desconocido.  Se casa en terceras con un francés de nombre Odín), padres de:

Jorge Cornick

Mariano Rodríguez Rodríguez, casado con

Jesús Conejo Castro,

Rafael María Rodríguez Rodríguez*, casado con Emilia Caballero Gamboa*, 

 

 Emilia Caballero y Rafael Lucas Rodríguez Caballero

padres de:

Rafael Lucas Rodríguez Caballero,

“Hijo preclaro de San Ramón, y una de las figuras más prestigiosas de América Latina en el campo de la investigación.  El Doctor Rafael Lucas disfrutó de justa fama internacional como biólogo, botánico, escritor, dibujante, pintor en el campo de las Ciencias naturales, conferencista y profesor universitario.

Nace en el año 1915, el 4 de marzo.  De padres ramonenses, el Dr. Rafael María Rodríguez y doña Emilia Caballero, ésta quedó viuda poco después de su matrimonio y se consagra por completo a la crianza de su hijo. Rafael Lucas es un excelente estudiante, se gradúa de Bachiller en Ciencias y Letras del Liceo de Costa Rica, luego tiene otra graduación con honores en la Escuela Mercantil Manuel Aragón.

El Director del Liceo lo nombra ayudante del laboratorio de biología, botánica, zoología, anatomía e higiene.  Este trabajo despierta en Rafael Lucas un gran interés por dedicarse a las ciencias hasta convertirse en un connotado científico.  

Hizo su Licenciatura en Ciencias en la Universidad de Costa Rica y un doctorado en Botánica en la Universidad de Berkeley en 1953 con la investigación “Estudios anatómicos sistemáticos de Myrrhidendrom Donnel Smyrthi y otras umbelares leñosas”.  Por esta universidad tiene un gran cariño, allá fue a recibir honores, a dictar conferencias y a hacer publicaciones. Además del mérito que gozó como estudioso y maestro, sorprendió como un humanista que motivó juventudes.  Al menos así lo recuerda una de sus alumnas, la Directora de la Escuela de Biología de la UCR donde en 1980 se bautizó con su nombre el edificio. ‘De sus estímulos, asegura la docente, dependió la formación de muchos científicos jóvenes.  Sus clases fueron siempre amenas e interesantes y si enseñanza de un valor inapreciable.  Aportó sabiduría y experiencia con espontaneidad, simpatía y modestia.  Pero además de ese ambiente acogedor que generaba la personalidad del Dr. Rodríguez C., sus seguidores le reconocen haber sido el creador de la Escuela de Biología en 1958, unidad académica que dirigió tres períodos consecutivos.  A él se le atribuye haber dado impulso y determinado su organización y desarrollo’.

En el año 1968 el científico contrae matrimonio con la profesora universitaria Hortensia Sevilla Álvarez, de su misma categoría intelectual (…). En sus ratos libres, nuestro científico se distraía con la pintura, las manualidades, la cerámica, el escultismo, filatelismo y la arqueología.  Formó parte del coro universitario durante 17 años.  Con sus dibujos se ilustraron tres series de estampillas emitidas por la Dirección General de Correos, siempre con el tema de las orquídeas.

En 1970 diseña el dibujo de la Guaria Morada para estampar los billetes de cinco colones.  Cuando  estuvo en Estados Unidos, sus artículos numerosos aparecen publicados en importantes revistas en inglés, de circulación internacional. Recibe muchos honores y premios en su vida de estudioso: el premio ‘Áncora’ en ciencias en nombre de la Revista de ‘Biología Tropical’ que fundó,  el premio Nacional de Cultura Magón en 1977, éste es el más alto reconocimiento que concede el Estado a un costarricense. Fue cofundador del ICECU desde 1963, colaborando en las primeras investigaciones y modos de la difusión de la cultura en el mundo campesino. El Doctor Rafael Lucas Rodríguez muere el 19 de mayo de 1981” (Ángela Quesada, 1996, pp.193-195).

        Casado con Hortensia Sevilla Álvarez, padres de:

Rafael Rodríguez Sevilla,

María Rodríguez Sevilla y

Eleonora Rodríguez Sevilla.